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martes, 27 de noviembre de 2012

Etiquetas las de la ropa.

Sociedad de la basura que etiqueta cual fábrica de ropa a las personas. Gorda, puta, gay o masoca. La cosa es etiquetar. La cosa es sacar a la luz los defectos de los demás, abrirles las entrañas y darle donde más les duele. Si no entiende un ejercicio de clase es retrasada/o, si ha follado con su novio es una puta, si tiene un problema psicológico es un loco que han de llevar al manicomio. ¿HOLA? ¿En que coño se ha convertido el mundo? Es incluso peor que antes. Hace tiempo te quemaban en la hoguera si creían que eras una bruja, ahora el castigo es mucho peor. Ahora te castigan con el bullyng u otro tipo de exclusiones sociales. ¿No ves que es su vida? ¡Que a ti ni te va ni te viene! Es una persona, como tu y como yo, es una persona... la culpa la tiene la sociedad, la presión de grupo. Si no humillas a alguien que está tachado como "raro" te lo devuelven y ya eres otra víctima mas de sus indeseables torturas. Y sólo es por el miedo a ser diferente que los demás. A sacar tus ideales del armario y dar la cara por lo que de verdad eres. Cariño... primero respétate a ti mismo y aprende a respetar si quieren que te respeten. Es una regla de tres.
Tengo miedo. Miro blogs de gente que lo está pasando realmente mal, al igual que tweets o vídeos. Incluso yo lo he llegado a vivir pasivamente y que se lo hagan a una de las personas que mas quieres en este mundo, duele y te debilita. Mas que nada es impotencia por no poder ayudar, por ver a gente sufrirlo y acatar las reglas de la sociedad cual maniquí. No, yo no soy así, yo no callo ni me dejo manejar, pero por mucho que intente hacer la sociedad me puede, es una masa y contra la masa se puede hacer poco. Y tanto que hablo de la sociedad... ¿que es? gente, no personas. La gente en masa que acata las leyes del estado cual soldado acata las de sus superiores. Entendedlo, nadie está aquí para hacer lo que uno no quiere hacer. Cada uno va a su bola, cada uno hace lo que le da la real gana. Por eso tiene aún mas delito ser una marioneta aún pudiendo coger unas tijeras y cortar esas cuerdas que te sujetan a tu realidad. Es tu propia realidad y si quieres la puedes cambiar. Y aviso para navegantes: también puedes cambiar este mundo. Puedes dejar de insultar a esa chica que llamas gorda cuando te lo digan, porque quizás, sólo quizás, habrá pasado por algo peor. A lo mejor su padre está muy enfermo o sufre problemas psicológicos. Tu no lo sabes. Tu no sabes quien es y no tienes derecho a tratarle de esa forma. Es una persona y tiene derecho a vivir su vida sin que cuatro gilipollas la vallan insultando a cada sitio que va. Piénsalo.

jueves, 22 de noviembre de 2012

Inténtalo.


-¡No puedo mas!- 

Exclama levantándose llena de rabia. Se sienta en el suelo, al calor de la calefacción. Siente frío. El suelo, la mesa, los libros, el ambiente, los pensamientos... pero sobre todo las lágrimas... Puro hielo que se desliza por sus mejillas. Ni siquiera la calefacción las derrite. Canta para despejarse. No puede pronunciar una palabra sin que ese extraño sonido, que siempre emite cuando llora, la interrumpa. No quiere saber nada de nadie, solo quiere desahogarse. Prefiere hablar pero sabe que aquí no tiene a nadie. 




- Nadie, 

                 nadie...- 







Aún le recuerdo, aun los recuerdo... No aguanta el recuerdo, recordar es difícil, recordar sola es difícil. Hay métodos más fáciles, de cobardes, pero mejores que seguir así, sufriendo.
<<Es ser egoísta con la gente que me quiere, aun siendo pocos… >>.
 Es ser egoísta con ella misma, tanto para nada. Tantos obstáculos superados...
 Gira la cabeza y dirige la mirada hacia un pequeño escuche que guarda en un escondite de debajo de la mesa. Con sigilo lo coge y levanta su tapa dejando escapar un leve rechinado de las bisagras oxidadas. En su interior hay vendas y medicamentos, poco a poco los va apoyando sobre el suelo dejando al descubierto una cuchilla de plata con una enredadera tallada en su empuñadura. Era una de esas viejas cuchillas de barbero antigua. La recordaba a la película de Tim Burton "Swenney Todd" en la que Johny Depp hace de un barbero que va matando gente para vengarse. Es idéntica. La coge y la observa. La da vueltas buscando una respuesta que esté más allá de la violencia, de la muerte. Nunca ha temido a la muerte. Piensa que solo es el despertar de un sueño, de una simple mentira que nos esclaviza. Coge la cuchilla por la empuñadura y se la dirige hacia el cuello. Simula los mismos movimientos que hacía su abuelo al afeitarse. Todos los días que su abuelo se afeitaba no podía evitar asomarse al cuarto de baño para mirar como lo hacía. Le parecía atractivo ver la cuchilla pasar por la piel sin hacerle ni un solo rasguño. Seguro que nadie lo hacía mejor que él.
Vuelve a observar la cuchilla una vez más. <<Es tan bonita...>>  Despacio, la dirige hacia su brazo y con lentitud la va acercando hacia su muñeca. Se para en seco y dirige su mirada hacia el techo recordando esa infancia tan difícil que la hizo cambiar de golpe. Se remanga dejando al descubierto las cicatrices que años atrás empezaron a convertirse en costumbre. Y pensar que todo empezó por un pequeño mal entendido… no se lo merecía, claro que no. <<Nadie se merece que la hagan esas cosas. Todo es demasiado injusto. La sociedad es injusta>>. Piensa mientras apoya la navaja sobre su pálida y helada piel. Suavemente se desliza con la ayuda de su tacto cual patín en el hielo dejando un rastro carmín que gotea sobre su rodilla. Lo siente, siente lo que está haciendo. Siente maltratarse de ese modo. Siente su sangre inundar la habitación, siente que se ahoga, se ahoga en sus torturas, se ahoga en la incompetencia de las personas…

Abre los ojos y empieza a llorar con más fuerza, tira la navaja contra la pared y se mira el brazo rastreándolo de arriba abajo, nada, ni una gota de sangre. Se lo aprieta con fuerza dejando escapar una mueca de dolor, hace mucho que no lo hace pero aún la sigue doliendo. Empieza a recordar el motivo de cada una y siente ganas, muchísimas ganas... 

<<¿De verdad es lo mejor? ¿De verdad crees que es necesario? Es una vida, no un juguete. Es TU vida. Tienes que valorarla. VALÓRATE DE UNA VEZ y deja de subestimarte y de auto compadecerte. Así no llegarás a nada. Has de levantarte y superar todo lo que está por encima de ti, eres más que eso>>.

 Sabe que la costó dejarlo, y que se lo debe a su familia, a sus chicas y a él. Él que tanto ha hecho por ella. No puede hacerlo, no le puede defraudar. Se levanta decidida coge la navaja que tanto daño la ha hecho y la guarda en la caja junto con las vendas y los medicamentos. No quiere tenerla cerca. No quiere recordar su pasado. Ha decidido pasar página y lo va a hacer. Guarda la caja en su bandolera y con paso avivado evitando preguntas se dirige a coger su bici. No muy lejos hay un bosque con un inmenso precipicio. La encanta que el viento la de en la cara. La encanta sentir que puede ser libre en algún momento del día. La apasiona ese lugar. La encanta ver revolotear a los pájaros sin ningún temor a perder el equilibrio y caer al vacío. Al llegar apoya en un árbol su llamativa bicicleta y se asoma al borde del precipicio, mira hacia abajo y se da la vuelta dándole la espalda. De su bandolera saca la caja. La abre y la vacía de los medicamentos. Solo deja ahí la navaja. La cierra y junto con ella sus ojos.

<<No quiero que me hagas más daño, no quiero perderme en esta realidad otra vez...
¡No quiero volver a verte!>>


Lanza hacia atrás el brazo dejando caer la pequeña caja por el inmenso precipicio. No se dará la vuelta, seguirá su camino sin mirar atrás y sin recordar el pasado que tanto la atormentaba. Ahora tiene una vida nueva. No quiere obstáculos que la frenen.